Gloria Estela Varela Porras
El taoísmo, filosofía opuesta al confucianismo (que considera que todo en la sociedad debe estar ordenado y reglamentado) ve en el orden natural el camino verdadero al que solamente hay que seguir en su curso.
La mayoría de los planteamientos acerca de la sexualidad china fueron probablemente elaborados entre los años 500 a 200 a.C. Se menciona con más precisión la dinastía Han (221 a.C. a 24 d.C.). En esos años se escribieron detallados tratados en los que se habla del tema.
El Taoísmo busca con el sexo garantizarle salud y larga vida al hombre aprovechando el orgasmo de la mujer a través de la absorción de su esencia.
A la vez la mujer se beneficia al activarse su naturaleza Yang latente. En varios textos taoístas el elemento femenino yin prevalece sobre el masculino yang.
El hombre debe retener el semen que se supone vuelve al cerebro y lo revitaliza; para lograrlo fue necesario desarrollar una técnica que llevara a la mujer al orgasmo repetidamente, sin que el hombre eyaculara.